Las fiestas tradicionales definen el carácter de los hijos del pueblo y mantienen el arraigo con su tierra. De ahi su importancia, además del interés etnográfico y turístico. Quizás rito y significado hayan cambiado, adecuándose a los tiempos, tanto si la fiesta se ha mantenido y/o fue recuperada. Pero no ha variado la emoción que despierta en los vecinos, dificil de apreciar por visitantes y turistas. La Sierra Norte de Guadalajara disfruta de un centenar de ellas.
Un caso paradigmático es Retiendas y su fiesta de las Candelas, la única botarga que se mantuvo siempre (excepto los años de la guerra in-civil). Cada año el pueblo en fiesta acoge a un centenar de vecinos y decenas de visitantes. No importa la climatologia. En fines de semana anteriores y posteriores, apenas son visibles algunos vecinos y los turistas que se dirigen al Monasterio de Bonaval.
Este año una exposición de fotografías recorría la fiesta desde los años 40 hasta la actualidad. Los mayores se emocionaban al reconocer padres, tíos y conocidos; algunos contaban anécdotas de ellos. Solo por ver estas escenas mereció la pena ir. Bueno por eso y por ver a Noelia de botarga. Lo bordó; ella es así.
Lar-ami, gerente de CR La Vereda de Puebla, entre cárcavas y olivos milenarios. Todo sobre Actualidad, Costumbres, Fiestas, Mundo Rural y Paisajes y Lugares de la Sierra Norte de Guadalajara.