D. Ramón Menéndez Pidal en la Sierra Norte de Guadalajara


Don Ramón Menéndez Pidal y su esposa, María Goyri, recorrieron las tierras castellanas siguiendo los pasos del Campeador descritos en el Cantar de mío Cid. Según nos cuenta el maestro Tomás Gismera, llegaron a Atienza el 23 de mayo de 1.903, acompañados de su hermano Juan, que era el gobernador de la provincia, personalidades de la Sierra Norte de Guadalajara y maestros de la villa.

Su llegada a Atienza, donde comieron, y a Miedes fue apotéosica; todo el pueblo salió a recibirles. Fue la primera toma de contacto con estas tierras del insigne historiador, medievalista, etnólogo y lingüista de la generación del 98.

Don Ramón constató en su tratado que Rodrigo Díaz de Vivar pasó por Albendiego y cruzó la sierra por el alto de Pelagallinas, cuyo río siguió hasta la cueva del Oso. De ahí a Prádena, cruzó por Robledo de Corpes y fué hasta Pálmaces de Jadraque. Desde allí siguió hasta Torremocha de Jadraque, pasó por Cendejas, y cruzó el río Henares por Moratilla. Luego subió siguiendo el cauce hasta Castejón de Henares, tomando la villa y donde residió un tiempo, mientras espera a Alvar Fañez en su algarada por Guadalajara.

El poema le dedica un centenar de versos:

  • Tendré yo Castejón donde tendremos gran guarda
  • si peligro os viniere alguna en algara
  • Mandadme aviso muy presto a la zaga;
  • De este socorro, hablara toda España

Lar-ami, gerente de CR La Vereda de Puebla, entre cárcavas y olivos milenarios. Todo sobre Actualidad, Costumbres, Fiestas, Mundo Rural y Paisajes y Lugares de la Sierra Norte de Guadalajara.


Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *