Tiempos convulsos que afectaron a todo el país pero tuvieron especial significancia en la Sierra Norte. Durante la Guerra de Independencia, los guerrilleros del Empecinado tuvieron aquí su campo de batalla (y en Cogolludo su cuartel general).
Tras la guerra, el pueblo trató de volver a la normalidad pero surgieron partidas de bandoleros. Si a esto añadimos el absolutismo, el liberalismo, las guerras carlistas, las convulsiones de la I República, la vuelta a la monarquía, las guerras coloniales, … se comprenderá que esta tierra quedara exhausta.
La guerra con los franceses, las desamortizaciones liberal y de Mendizabal provocaron el abandono de monasterios (Bonaval) y conventos (Franciscanos de Tamajón y Cogolludo), ya muy dañados, así como la pérdida de innumerables muebles, pinturas, ropajes, alhajas y elementos litúrgicos. La construcción de la iglesia de Cendejas de Enmedio en este siglo es una rareza.
El fin de los Señoríos y la independencia de los municipios (1.834) creó ciertas expectativas que pronto se vieron cercenadas por la desamortización de Madoz (afectaba a bienes comunales) que empobrecieron a nuestros pueblos. Perdieron los bienes propios que pasaron a manos de especuladores. Algunos fueron recuperadas por el pueblo (previo pago) pero otras cayeron en desuso y acabaron en ruina. Especialmente aquellos que no ofrecían una rentabilidad inmediata (castillos, torreones, ermitas, …)
A mitad de siglo, tras su descubrimiento en Hiendelancina, la “fiebre de la plata” recorrió la Sierra Norte. Surgió una conciencia social para solucionar los problemas del pueblo: construcción y mantenimiento de edificios comunes, escuelas, molinos, hornos, calles, caminos,… con las Hacenderas y reutilizando materiales. Tamajón utilizó columnas y sillares del convento franciscano para restaurar su plaza mayor y la ermita de los Enebrales.
Lar-ami, gerente de CR La Vereda de Puebla, entre cárcavas y olivos milenarios. Todo sobre Actualidad, Costumbres, Fiestas, Mundo Rural y Paisajes y Lugares de la Sierra Norte de Guadalajara.