A pesar de que históricamente la Sierra Norte de Guadalajara siempre ha sido abundante en aguas (las cuencas de los ríos Jarama, Sorbe, Bornova, Cañamares y Salado albergan 5 embalses, con un capacidad superior a 340 Hms), en los últimos años no ha sido así y la sequía se repite.
Así lo recogimos en noviembre de 2.009, verano de 2.012 y en el invierno de 2.013. El cambio climático se hace patente en esta comarca, a pesar de lo que diga Mr Trump y Cía. No recordamos una sequía tan grave y persistente como esta. A modo de ejemplo:
Dicho así no parece tan preocupante (comparando con otras regiones del país), pero mirando las imágenes, ¡dan ganas de llorar! ¿O no?
Lar-ami