En la Sierra dicen que la cabra, aunque es gregaria, tiene una tendencia natural a moverse sola por el monte, al contrario que la oveja. Por eso los rebaños de cabras y ovejas pastoreaban por separado (ahora la escasez de ganado y pastores generan rebaños mixtos), aunque compartían territorio ya que comen la hierba a distinta altura.

Esa tendencia se hace más patente en los ejemplares jóvenes, que a menudo son vistos solos en medio de los pizarrales. Tendidos sobre la piedra, como resignados… Pero ¡que no te engañen!…, están reflexionando.

Dales tiempo y verás como se ponen de pié, otean el horizonte y tiran monte arriba en busca de su sitio. A veces, al encuentro de otros jóvenes para comenzar juntos una nueva andadura y/o en busca de mejores pastos.

Por eso cuando oigo la expresión “¡estáis como cabras!” dirigida a los jóvenes, me sonrío. Por la ignorancia del malhablado, que los alaba cuando quiso insultarles.

Lar-ami