Hace ya un par de años que ADEL Sierra Norte y Diputación apostaron por recuperar antiguos oficios, que podrían suponer una opción laboral (complementaria) para los desempleados de la comarca y permitiera asentar población en nuestros pueblos.

La recolección de la resina en los pinares fue uno de ellos. Así surgió un nuevo palabro, resinando, y renació un oficio poco conocido en estos lares (resinero), ya que la mayoría de nuestros pinos son de repoblación y plantados en los años sesenta.

Hoy se ven estampas que llaman la atención del viajero que cruza los pinares de Las Cabezadas (otro pueblo abandonado), camino de Las Navas de Jadraque. Bien merece que pares un momento para deleitarte con las imágenes y el olor penetrante de la resina. Y te preguntarás:

¿Qué significa ese letrero en alemán en la orilla de la carretera? ¿No podría estar en español?

Lar-ami