Tras las lluvias de abril, y con la vegetación en un momento exuberante, la ruta que va desde Tamajón a la Presa del Vado se hace especialmente deliciosa. Sobre todo, si no tienes prisa.
Busca los prismáticos y ve provisto de tiempo suficiente para disfrutar de un paisaje maravilloso. Encontrarás imágenes inolvidables.
Pero ninguna como las que ofrece Santa María del Vado desde la carretera (apareciendo entre los pinos) y vista desde el borde el pantano. No te contaré más.
Pero hazme caso y date una vuelta. Me lo agradecerás.
Lar-ami