Este espectáculo se celebra cada primavera desde el siglo XVIII, cuando los Borbones ordenaron que las orillas de ríos y arroyos fueran reforestadas con álamos blancos y negros, fresnos, sauces, alisos, chopos, … aunque este año por el maldito Covid19 nos lo estemos perdiendo.
En la Sierra Norte el chopo temblon brota a finales de febrero, florece en abril y se desprende de sus semillas en mayo, en forma de pelusas que el viento trata de dispersar, y que consigue a medias.
Los suelos de las choperas se visten de blanco, con una capa de varios centímetros que se levantan al paso del caminante, se pegan a la ropa y dificultan la respiracion. Si se tiene algún tipo de alergia, no es recomendable pasear por ellas. Pero si te lo puedes permitir, hazlo … porque estas imágenes no se olvidan.
Lar-ami, gerente de CR La Vereda de Puebla, entre cárcavas y olivos milenarios. Todo sobre Actualidad, Costumbres, Fiestas, Mundo Rural y Paisajes y Lugares de la Sierra Norte de Guadalajara.