Hace 20 años en Cogolludo unos jóvenes tomaron la iniciativa de reconvertir la finca de sus padres en viñas y bodegas, retomando la tradición vitivinícola de la Sierra Norte de Guadalajara. Las dificultades fueron muchas: suelos poco ácidos y pobres, escasez de agua (de pozo y en un futuro del río Henares), clima continental extremo, … que se han ido resolviendo en base a una apuesta clara por la calidad.
- La producción de uva por Ha es 5.000 Kgs, mientras que en otras zonas (Ribera de Duero) supera los 7.500.-kgs/Ha. Para conseguirlo, en octubre se tira uva al suelo (servirá de abono en la próxima cosecha), potenciando la hoja y por ende la calidad del fruto.
- Las viñas, en espalderas, tienen una orientación Norte Sur para aprovechar las horas de sol.
- Todas las tareas, incluida la vendimia (octubre), se realizan a mano, dando trabajo a 11 personas.
- Desde la corta hasta la llegada a bodega, no pasa 1 hora.
- La calidad del vino y la fermentación están en relación con la mezcla de variedades de uva y el hollejo, así como sus evoluciones dentro de las cubas de mosto. Aquí el proceso se mima.
- El vino reposa en bodega al menos 2 años (equivale a 5 años en cualquier Denominación de Origen).
Así consiguen un vino de altura (la finca está > 1.000 mts) y de calidad, a un precio razonable. La visita a la bodega, la celebración de eventos para empresas y un ambiente agradable para niños y adultos, convierten a Bodegas Rio Negro en un referente para la comarca. De lo que nos felicitamos los serranos.
Lar-ami