Vista la experiencia del Chorro de Valdesotos, miedo me da descubrir en esta bitácora rincones mágicos (nunca me perdonaré no haber previsto las consecuencias de divulgar los encantos de este lugar, que los animales de dos patas han destrozado este verano).
Porque haberlos, haylos, y en abundancia en esta nuestra (y vuestra) Sierra Norte. Los pescadores marcan senderos y veredas en las orillas de los ríos para acceder a lugares propicios para tirar la caña. En el Jarama hay una cincuentena; algunos muy escondidos y de difícil acceso.
Este que mostramos hoy está rodeado de alisos; el río viene bravo, aunque escaso de agua en estos días de otoño. Se accede por una sendita muy empinada entre quejigos, que la maleza oculta con espinos y arbustos. Pero el esfuerzo tiene su recompensa.
Un lugar apacible, solitario y muy hermoso, donde las prisas me desaparecen. ¿Dónde está? ….En el campo…Como decimos los serranos cuando nos preguntan por las setas
Lar-ami
2 respuestas a “Un rincón inédito en el Jarama”
Recuerdo ir al chorro en el final de los 80 absolutamente salvaje y cn un caudal importante . Ahora ni caudal ni salvaje una pena sin duda.
Cierto y me duele que sea así.