Hemos contado en numerosas ocasiones las características del puente medieval sobre el río Jarama que acogía al camino de herradura que comunicaba Valdesotos con Puebla de Valles.
Está formado por tres arcos de medio punto, dos laterales más pequeños y simétricos. El central mucho mayor, se apoya sobre las rocas y abarca todo el cauce del río, que baja encañonado.
Los pretiles de medio metro de altura, paralelos hasta los extremos en que se abren. El suelo empedrado, original con piedras de gran tamaño.
Pero nunca hemos presentado una fisonomía completa de este puente en la que se aprecie su belleza extasiante, en un entorno que se nos antoja único. Y no quisimos que pasase un solo día más sin hacerlo.
Lar-ami