Sabemos que la higuera es un árbol peculiar, por sus características (no tiene flores visibles), su historia (se recolecta desde hace más de 11.000 años) y sus leyendas. Por eso no debiera sorprendernos su imagen en otoño.
En La Ribera y durante las primeras semanas, conviven entre sus ramas higos maduros, hojas muertas y brotes, mientras el árbol mantiene higos en proceso de maduración y hojas verdes ya que la higuera da sus mejores frutos en Septiembre.
Conforme llegan las lluvias y avanza la estación, los higos se abren y su piel se reblandece. Otros se secan mientras las hojas amarillean y mueren.
Al final todos acaban en el suelo, salvo algunos frutos muy resecos que permanecen colgados. Pero cuando llegan los primeros fríos la higuera estará desnuda y así sobrevivirá hasta la primavera.
Lar-ami
Cuanta hambre quitó la higuera…
Y ahora no las cuidamos… Menos mal que es una superviviente nata…