Ya hemos explicado que el nombre de la Puebla (villa) viene marcado por su ubicación entre dos valles por los que corren (corrían) 2 arroyos: el Vallejo y el arroyo del Lugar que se unen aquí para ir juntos en busca del Jarama.
Como el Vallejo está canalizado y apenas fluye, pasa inadvertido. El arroyo del Lugar bordea el pueblo y tampoco llama la atención. Pero cuando llueve o nieva corre, tanto que antes las mujeres bajaban a lavar junto al puente.
Con la nieve adquieren protagonismo. Como este pasado lunes, 3 de febrero, que cayeron unos copitos que nos alegraron el día. Estas imágenes así lo muestran y por eso las compartimos.
Lar-ami