Para el caminante atento a los detalles, un paseo por La Ribera supone una lección constante de etnología, historia y naturaleza. De acuerdo, quizás exagere. Pero observen estas imágenes y juzguen Vdes.
Ya hemos comentado como la despoblación provocó el abandono del campo (los peor situados y/o menos fértiles) y la optimización de los otros. Y esto es muy visible en los meses de verano.
En los campos labrados la mixtura de cultivos está calculada para aprovechar al máximo la tierra y los recursos. Como se ve en la imagen 1, donde conviven en pocos metros: huertos, manzanos, olivos, higuera y nogales. O en la 2, con un hermoso fresno, olivos y cereales (ya cosechados); al fondo la media luna de Lomo Gordo.
Pero en los campos abandonados, el mix se debe a la agresividad de algunas plantas y a la casualidad. Como la parra que se mezcla con zarzas, robles, cabezuelas, … y cualquier otra planta cercana.
Lar-ami