Por una vez se está cumpliendo el dicho popular: “en abril, aguas mil”. Nieves y lluvias abundantes han colmatado el Pozo de los Ramos que deja escapar el agua por el Sorbe hacia el pantano de Beleña.
La tierra agradecida responde con pasión. Los trigales han crecido 20 centímetros en dos semanas, las plantas florecen y hasta la hierba comienza a resurgir en los rastrojos después del seco y frío invierno.
La primavera ya parece primavera.
Lar-ami
2 respuestas a “Tierra agradecida”
A este paso en cuatro días … a cosechar!
Desde luego, aunque las lluvias han llegado algo tarde y la cosecha no será buena.