Los trabajos de prospección de los Clubs de Espeleología dieron pronto sus frutos y así en 1.982 apareció la Cueva de Santiago, con un desarrollo de 315 metros. Pero su objetivo eran las simas (cuevas que descienden a las profundidades). El karst de Tamajón, por sus características está sembrado de ellas. SECJA siguió trabajando y aparecieron las simas más significativas de La Ribera:
- Flipper (192 mts desarrollo y 54 profundidad)
- Flipper II (72 y -26 mts)
- Cueva Vial (250 mts y -12 de profundidad)
- TA 11 (62 mts desarrollo y -6 mts)
Las entradas están taponadas y/o disimuladas para evitar riesgos innecesarios (se requiere especialización y medios). Pero ello no es óbice para que pongamos en valor nuestras simas y ofrezcamos a los espeleólogos la oportunidad de conocer el sitio de los Enebrales.
Lar-ami