En la ruta verde hacia el Vado, a un kilómetro del sifón de Valdesotos (¡vaya mirador!) hay un sitio singular, lleno de colorido y de contrastes. Se identifica porque está en una curva de areniscas, con un camino a la izquierda y un barranquejo que baja hacia el cañón del Jarama. Ahí se deja el coche.
El camino va a una granja en ruinas (propiedad particular), con nave y casa entre robles, que bien merecen el paseo (10´). Pero nuestra sugerencia es que bajes por el barranco, pasees entre las rocas y observes los colores.
Dos construcciones de pizarra en forma de cubo almacenan el agua de lluvia (una en el barranco y otra junto a la carretera). Datan de la época del canal del Jarama, si bien su función no está clara. Al fondo el río y su hoz, pinos y robles. Sin duda un lugar diferente de La Ribera, ¡para disfrutar!
Lar-ami