El 13 de julio de 1.818 el juez Riegas intentó que el deslinde fuese de mutuo acuerdo. Ambos lugares aceptaron, nombrando Tamajón como árbitro al abogado D. Vicente Gamo y Montúfar y Retiendas al capellán D. Santos Santa-María. Tamajón propuso como válido el deslinde acordado el 24 de julio de 1.813, que Retiendas no aceptó, porque entendía que le correspondía más término. En un tono arrogante, Tamajón comunica al juez que suspenden el acuerdo y le solicitan “procediese como convenga, pero teniendo presente el deslinde de 1.813”.

La reacción de D. José Riegas fue contundente. Ordenó que “en el plazo de 3 días se presente agrimensor competente de cada villa para que procedan al deslinde. Comenzarán al día siguiente, 15 de julio, a las 6,00 h en Navaluenga, para lo que se habilitan las noches».

En un tono humilde Tamajón respondió que no hay agrimensor en la villa y que se harán diligencias para buscarle. Que las mojoneras se pueden hacer con los documentos que tiene esta villa y que hasta ahora no reconocían otra jurisdicción que la Tamajón. Retoman los árbitros nombrados al efecto, D. Vicente y D. Santos, para que realicen la mojonera desde el alto de los collados hasta el Jarama esa misma tarde.

Lar-ami