Cuentan que en Puebla de Valles un niño preguntó a su abuelo cual era la diferencia entre vejez y decrepitud. El anciano no contestó.
Días después, cogió de la mano al pequeño y bajaron por el camino real hacia el río. Junto al arroyo del Lugar le mostró el olivo y el nogal que aparecen en estas fotos. ¿Ves la diferencia? El niño sonrió.
Lar-ami