De este arbusto se habla poco y mal. Los labradores mencionan el espino para relacionarlo con la maleza, como un mal que solo crea problemas y hay que extirpar.
Los mayores del lugar también hablan de sus propiedades curativas y de cómo sus abuelas lo utilizaban para remediar los dolores de cabeza.
Pero cuando llega la primavera, los espinos se visten de blanco y embellecen el paisaje. Entonces se hacen más visibles y descubrimos que no solo crecen en la maleza. Un majestuoso espino en medio de un trigal es una imagen que no se olvida.
Blanco y verde, como los colores del Betis, se mezclan para crear escenas muy hermosas.
Lar-ami
2 respuestas a “Espinos en flor”
Bella primavera!
Este año, excepcional!