Antes de la crisis, el consumo de jamón de pata negra excedía en mucho la producción de cerdo ibérico en las dehesas españolas. Se decía que la mayoría procedían de los países del este, si bien los métodos de curación eran los propios de cada Denominación de Origen.
Ahora los excedentes de jamón son tan abundantes que su precio ha caído en picado y los tiempos de curación se han alargado, lo que ha disminuido su calidad. Y esto ha llevado a muchos a plantearse si aún quedan cerdos ibéricos de pata negra, de los de toda la vida.
Y si, aún existen piaras de cerdos ibéricos. Al menos en las dehesas de la Sierra de Hornachuelos, parque natural vecino de Palma del Río, la tierra chica de los propietarios de la casa rural que protejo y guardo. Y dejo aquí testimonio gráfico de ello.
Lar-ami
2 respuestas a “Pata negra”
Bonitas estampas…
Desde luego.