Un grupo de amigos han estado alojados en la casa con la sana intención de pasar unos días disfrutando de su mutua compañía y visitar aquellos enclaves más significativos de La Ribera. El anfitrión ejerció de cicerone y preparó excursiones cortas, a cada cual más interesante:
* El Chorro, con un recorrido por Valdesotos. Lástima que la crecida del río Palancares obligara a mojarse los pies hasta los tobillos, pero las chorreras estaban espléndidas.
* El puente árabe con visita a Beleña de Sorbe y comida campestre bajo los olivos y la atenta mirada del castillo de Doña Urraca.
* El Monasterio de Bonaval, desde los miradores y recorrido por sus alrededores.
La visita a una almazara, restaurada con exquisito gusto, la cena del sábado, el aperitivo del domingo y las consiguientes tertulias pusieron colofón a un fin de semana inolvidable.
Gracias amigos. ¡Tenemos que repetirlo!
Lar-ami
2 respuestas a “Desde la casa rural”
Seguro que han disfrutado de lo lindo, con guías como tú Lar ami, dá gusto!
Gracias odette, espero que así haya sido.