El 16 de julio se han cumplido 7 años del pavoroso incendio en el Alto Tajo en Guadalajara, que calcinó 13.000 Has y se llevó la vida de 11 profesionales de la lucha contra el fuego; para ellos nuestro más emocionado recuerdo.  Nuestro agradecimiento y respeto para sus compañeros, por protegernos y por dar vida a los pueblos pequeños.

La plaga también llegó a La Ribera, coincidiendo con los incendios de Valencia. En la tarde del 7 de julio, una chispa producida por el peine de una cosechadora al chocar contra la piedra en la besana Rubial (limite de los términos de Valdepeñas de la Sierra y Tortuero).

El fuerte viento lo extendió al este, calcinando la umbría del Alto de la Peña y el campo de cereales. Las llamas se veían desde Puebla de Valles y el humo desde Guadalajara. Se han quemado 65 Has, con  encinas centenarias (en el convento de Tortuero), quejigos, alisos, álamos, fresnos y chopos, robles (junto al castillo de Tortuero) y jarales. Afortunadamante, el impacto en el paisaje ha sido reducido, por ubicación y tamaño.

La excelente y arriesgada actuación (por la pendiente y mal estado de los caminos) de los retenes antiincendios fue definitiva. Máxime cuando solo pudieron actuar hidroaviones, ya que la línea de alta tensión impidió el uso de helicópteros; a la 1 de la madrugada, el incendio estuvo controlado. La carretera del Canal del  Jarama (la ruta verde)  y el arroyo Concha actuaron de cortafuegos.

Otro fuego en Muriel,  el mismo dia,  fue apagado con rapidez y pocos daños.

Lar-ami