Cosa de regueras


El Plan de regadío trajo a Puebla de Valles una red cuadricular (al estilo del casco urbano de Tamajón, salvando las distancias) de acequias. El canal principal seguía el camino de las viñas y desde aquí partían en perpendicular pequeñas acequias que llevaban el agua a las parcelas.

Las infraestructuras se construyeron de hormigón con mano de obra y grava del pueblo, y cuando el proyecto fracasó se fueron eliminando, según convenía a tractores y arados. Aún se conservan (sin uso)  el acueducto sobre el Muradiel, trozos de canalillos (regueras), arquetas y parte del canal principal.

Sorprende  el recto trazado de las acequias y su abandono. Puro contraste con el aspecto cuidado y lustroso que presenta la reguera de La Cespedera, que hasta tiene un puente de palos para el paso de coches. Lo que demuestra que lo práctico no está reñido con lo bello. ¡Tenía que contarlo!

Lar-ami


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