La iglesia de Tamajón es de origen románico y conserva en su interior elementos de singular belleza. Durante la guerra quedó muy deteriorada y aunque posteriormente se reconstruyó, algunas piezas han perdido para siempre su aspecto original. Como el púlpito de Alonso de Covarrubias, fechada en 1.529, una joya del Renacimiento español de estilo plateresco.
Afortunadamente en el archivo del CEFIHGU se conservan dos fotos anteriores a la guerra civil, en las que se aprecia el púlpito en todo su esplendor. Una fue realizada por el maestro Tomás Camarillo y la otra por D. Francisco Layna Serrano, cronista oficial de Guadalajara desde 1.934 hasta su muerte en 1.971.
Fotos actuales, tomadas por el propietario de la casa que protejo y guardo, permiten comprobar que del original se conserva muy poco.