Patrón de los labradores y protector de los campos desde 1.622, su devoción está muy extendida por La Ribera. Quizás porque vivió en pueblos próximos (Torrelaguna, Uceda y Talamanca del Jarama) poco después de la Reconquista, a principios del siglo XII.
Su fiesta (15 mayo) se celebraba en nuestros pueblos de forma parecida, con misa y procesión del santo para que bendijera los campos; en algunos se repartía la caridad de San Isidro. En unos lugares el santo llegaba hasta las eras (Valdepeñas, Tortuero, La Mierla) y en otros hasta lo sembrado ese año (Tamajón y Retiendas).
En Puebla de Valles la procesión bajaba siempre a la vega del Jarama pero su recorrido era variable, según lo sembrado y/o la petición de algún labrador para que el santo visitase su tierra. Años hubo que llegó hasta la Fresnera (en el arroyo Muradiel, a casi 4 Kms del pueblo). Luego se repartía la caridad en un lugar que aún es conocido como la Caridad de San Isidro.
La despoblación acabó con la costumbre, si bien se ha mantenido en algunos pueblos de Guadalajara.
Lar-ami