Retiendas no se entendería sin el Monasterio de Bonaval, ni por su origen como pueblo que prestaba servicio al cenobio, ni por su historia posterior. Cuando en el siglo XVI se convirtió en residencia para los monjes mayores y perdió su independencia, el municipio decayó para siempre.
¿Sabías que los relojes de sol del monasterio no funcionan porque están mal orientados? La desamortización de Mendizábal lo puso en manos privadas en 1.821, y en 1.894 fue comprado por gentes del pueblo por 20.500 duros de plata (unos 615 euros).
En los años 80 se pensó en hacer una presa en el Jarama por debajo de Bonaval. Los ecologistas dicen que sus protestas pararon el proyecto, pero la realidad es que las oquedades impedían cimientos sólidos. Hay decenas de cuevas en la zona, algunas con varias salidas. Un ladrón las utilizaba para escapar de la guardia civil, cuando les guiaba hasta allí en busca del botín.
Y una curiosidad más: la botarga de la Candelaria es la única de Guadalajara que nunca dejó de salir. Déjate aconsejar y visita Retiendas; luego te acercas a Bonaval.
Yo lo hago yo con frecuencia y me vuelvo a Puebla de Valles siguiendo el cañón del Jarama. ¡Que espectáculo!
Lar-ami