La capacidad de colonización de la jara es proverbial, al menos en la Sierra Norte.
Crece en cualquier terreno, por muy seco ó pedregoso que sea, rodeando con respeto los árboles que encuentra a su paso. Especialmente robles, quejigos, encinas y pinos.
En junio la sierra cubre sus montes y cerros de un manto blanco de flores de jara, creando imágenes únicas. Vente a la VII ruta de la Jara y lo comprobarás.
Lar-ami
2 respuestas a “Entre jaras”
Lo vuestro es un no parar. Seguro que los clientes que se alojen en la casa rural Vereda de Puebla lo pasan en grande haciendo la Ruta de la Jara y descubriendo esas maravillas que tienen los pueblos negros.
Asi es. Ahora nos hemos ido a otro hemisferio a visitar a nuestros nietos