Ubicado en el cerro del Llanillo, Canrayao observa la vega mientras el arroyo corre presuroso a sus pies en busca del Jarama. La tradición dice que Canrayao fue abandonado dos veces: en la Edad Media por la peste y en la segunda mitad del siglo XIX por una invasión de hormigas y/o el envenenamiento masivo por un mozo despechado.
(Un bonito cuento narra las dos versiones de esta leyenda, según recoge el libro “Puebla de Valles, usos costumbres, cuentos y leyendas” publicado por AACHE ediciones).
El Libro de la Montería de Alfonso XI (siglo XIV) lo menciona y aparece en las Relaciones Topográficas de Felipe II de Matarrubia (siglo XVI) : «Ay en su termino vn sitio despoblado que se dice Canrayado; no se sabe de su poblacion, ni por que se despobló, ni por que se llama deste nombre». Algun autor afirma que la pila bautismal y una de las campanas fueron llevadas a la iglesia de Matarrubia.
Hoy solo existe la fuente y los cimientos de casas y corrales que permiten vislumbrar la distribución de calles yplaza. Hasta la guerra civil se mantuvieron de pie algunos paredones de la iglesia y corrales.
Lar-ami